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Comienza desde Arriba: Cuando comiences a limpiar, comienza desde arriba y trabaja hacia abajo. Esto significa limpiar las superficies elevadas, como estantes y gabinetes, antes de limpiar el piso para evitar que caiga polvo y suciedad sobre áreas previamente limpiadas.
Enfócate en los Detalles: Presta atención a los detalles durante tu limpieza general. Dedica tiempo a limpiar áreas que a menudo se pasan por alto, como los marcos de las puertas, los zócalos y los interruptores de luz.
Establece Rutinas de Mantenimiento: Una vez que hayas completado tu limpieza general, establece rutinas de mantenimiento regulares para mantener tu hogar limpio y ordenado a largo plazo. Dedica tiempo a limpiar áreas específicas de tu hogar cada semana para evitar que la suciedad y el desorden se acumulen.
Con estos consejos útiles, puedes organizar y llevar a cabo una genial limpieza general en tu hogar, dejándolo impecable y listo para disfrutar.